Yo soy de la opinión de que no todo se nos debe dar masticado, que muchas veces es mejor imaginar que ver, es mas, la imaginación puede ser mucho mas terrible que cualquier escena y en eso el film de Vermut es antológico, la película tiene una factura pulcra, una fotografía que calificaríamos de clara, blanca, mientras que la historia de este puzzle que envuelve la vida de estas personas es oscura, malsana y terrible.
Partiendo de una situación de desesperación los personajes nos van mostrando su lado mas oscuro, vil y perturbado, nada del comienzo puede presagiar lo que vamos a ir viendo.
La interpretación del triángulo protagonista es más que notable, comenzado por un sutil Luis Bermejo, continuando con un siempre magnífico José Sacristán y terminando con el centro de la historia, el personaje sobre el que rotan los demás, la asombrosa Barbara Lennie, en un papel muy complicado y para nada
olvidable.
La dirección del casi novel Carlos Vermut es austera, con predilección por los interiores, de planos largos, de silencios, perfecta para lo que nos cuenta. Se que es un film difícil, que no va a gustar a todo el mundo, pero si entras en Magical Girl sin saber mucho y te envuelve, te va a sorprender y mucho.
Muy recomendable.
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